jueves, 30 de septiembre de 2010

La soledad y yo soy vintage porque el mundo me ha hecho así (collar corazón)

¿Qué tal?
Es curioso que ni la certeza de la muerte, ni las leyes de la naturaleza, ni la esperanza de otra vida mejor logren prepararnos nunca para un duelo. Y así como quien más quien menos está listo para asumir que puede que mañana no esté aquí, creo que a todos se nos ponen los pelos de punta si pensamos en que nos pueden faltar nuestros seres queridos. Creo que esa es nuestra mayor pesadilla, nuestro mayor miedo.
En la lucha por convivir con ese miedo, a veces elijo obviarlo y directamente no pensar en el. Otras veces maldigo al guionista al que se le ocurrió jugar así con nuestros destinos y dejarnos solos una y otra vez.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Vivo sin vivir en mí...

...y tan alta vida espero, que no tengo tiempo pa ná. Y básicamente por pudor y para informar, a quien le pueda interesar, de que me encuentro en un buen estado de salud (salvo por los nervios), vaya esta entrada.
Espero poder colgar algo este fin de semana y pasarme por todos vuestros blogs y dejar de estar ocupada con cosas peregrinas de esas que te dan mucha rabia pero que no hay manera de eludir.
¡SALUDOS A TODOS!

jueves, 9 de septiembre de 2010

A veces comprendes...

...lo increíblemente insignificante que eres...
 ...en medio de la inmensidad...


...con algo capaz de transformarse a cada segundo inexorablemente, creando ante tus ojos un paisaje postapocalíptico...

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Más anillos de svarowsky y el karma

¿Qué tal?
La pausa de varios días se ha alargado a tres semanas, lo sé. Pero es que para mí es como si no hubiera pasado el tiempo. He creído que los días no transcurrían y me he estado planteando seriamente quedarme a vivir en Islandia, con sus paisajes, su aire puro, su amor por la naturaleza, su paz de espíritu y sus elfos, hadas y enanitos. He descubierto que me gustan los vikingos y yo, que me creía urbanita al 100%, me he quedado completamente colgada de esos paisajes. Además, allí, quien más quien menos, cose, tricota o hace abalorios. ¡Mi paraíso!...ja, ja...